sábado, 21 de febrero de 2015

Con el PP el "otro by pass por Paterna" ha seguido su trámite, lo tendrá que resolver el próximo gobierno

El ´bypass´ logra el visto bueno ambiental y tendrá un nuevo enlace con la A-3

El proyecto del nuevo bypass ha recibido durante el periodo de información pública, un total de 174 informes y alegaciones particulares, de ellas 9 de administraciones públicas, 20 de ayuntamientos y 145 de público interesado. No hay fecha para la licitación de las obras y aunque Delegación del Gobierno aseguró que saldrían a concurso en 2015 es poco probable porque en los presupuestos del Ministerio de Fomento para este año sólo hay una partida de 5.000 euros.

El Ministerio de Medio Ambiente ha dado el visto bueno ambiental a la ampliación del bypass, en los tramos al norte (zona de Sagunt) y al sur (Riba-roja y Algemesí) de la circunvalación de Valencia, que se tramita desde el año 2005, aunque el proyecto ha sufrido profundas modificaciones.

Esta declaración de impacto ambiental (DIA) no incluye la ampliación del tramo central del bypass de 22,5 kilómetros, entre Puçol y la A-3 (con el controvertido paso por la zona de la Canyada), que se tramita en otra DIA independiente.

El proyecto de ampliación del bypass que ha logrado la aprobación ambiental prevé construir
11,9 kilómetros de nueva autovía entre Sagunt y Puçol, otros 14,9 kilómetros de un nuevo ramal para conectar la A-3 con el bypass (a través de Cheste, Chiva, Loriguilla y Riba-roja) y 30,4 kilómetros más de un nuevo ramal del bypass totalmente separado del actual que discurrirá entre Quart de Poblet, Aldaia, Torrent, Picassent, Benifaió, Alginet, Almussafes y Sollana.

La envergadura del proyecto la revelan las estructuras que incluirá esta segunda circunvalación: 26 viaductos, 27 pasos superiores o inferiores en el tramo norte (la zona de Sagunt), 13 viaductos y 14 pasos superiores o inferiores en la conexión con la A-3 (zona de Cheste, Chiva y Loriguilla) y 33 viaductos junto a 30 pasos superiores o inferiores en la zona entre Quart de Poblet y Sollana. El nuevo proyecto incluye conexiones y enlaces con carreteras autonómicas, comarcales y estatales como la AP-7, la A-7, la A-3 y la A-23 (Autovía Mudéjar).

Los nuevos tramos que se construirán serán libres de peaje, según recoge la declaración de impacto ambiental, aunque en el pasado se ha llegado a barajar la posibilidad de cobrar peaje a los vehículos de largo recorrido. El objetivo principal del proyecto es, precisamente, separar los tráficos de largo recorrido del local o de agitación, para reducir la siniestralidad y mejorar los tiempos de viaje.

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